Germinar nuestras semillas de marihuana usando una servilleta es quizás una de las técnicas más comunes debido a su sencillez y lo fácil que es conseguir los materiales.
En esta guía encontrarás toda la información para germinar esta técnica:
Usando esta técnica de la manera adecuada, logré tener una tasa de germinación por encima al 95 % (con semillas de buena calidad).
Repasemos rápidamente algunas ventajas y algunas desventajas antes de entrar en materia:
PS: Si no lo has hecho empieza leyendo nuestra guía completa de cómo germinar semillas de marihuana. Lo puedes hacer ahora o despues de leer este artículo. Pero te la recomiendo porque tiene información muy útil para principiantes y expertos.
Esta técnica requiere poco esfuerzo y te permite mantener la humedad de manera efectiva.
Si lo haces bien y tienes la semilla de cannabis adecuada (ver: 5 factores que debes tener en cuenta para escoger tu primera semilla de marihuana) el riesgo de fallar es menor al 2%.
Esta es quizás la principal ventaja. Los materiales para germinar semillas de cannabis con esta técnica los consigues en tu hogar. No tienes que salir, ¡Qué viva la pereza!
Con esta técnica tus semillas de cannabis se exponen muy poco a los riesgos en el medioambiente. Menos riesgos = mayor tasa de germinación.
La desventaja principal de esta técnica es que a medida que la raíz aparece, esta se puede ir enredando en la servilleta. Esta condición junto con el hecho de tener que moverla o trasplantarla con tus manos, puede representar un riesgo para tu preciada semilla de cannabis.
Nota: Por eso recomiendo usar una servilleta gruesa o scott cocina. Es más dificil que la raiz se enrede en la servilleta y aboserbe más agua. Papel higénico es la última opción si no consigues nada más.
En nuestro artículo introductorio sobre la germinación (ver: Cómo germinar semillas de marihuana: La guía completa) explicamos lo importante que es el agua en la germinación. Si dejas sin agua tus semillas por un día puede que al día siguiente ya no sobrevivan. Con esta técnica debes revisar todos los días que las servilletas estén húmedas y que tus semillas de marihuana tengan acceso a agua. Si vas a usar esta técnica te recomiendo que tengas buena memoria o que tengas un buen método para recordar revisar tus semillas.
Para germinar tu semillas usando la técnica de la servilleta necesitas los siguientes materiales:
Ya se me olvidó si lo he mencionado antes pero el éxito de esta técnica depende 100% en no dejar que las servilletas, y por ende tus semillas de cannabis, se sequen. ¿Te lo repito? Lo haría mil veces con tal de evitar que tengas la cara de frustración que tuve yo cuando se me murió un par por ese descuido.
Paso 1 - Humedecer las servilletas:
Pon una de las servilletas (a mí me gusta usar Scott cocina porque absorbe más y se mantiene más tiempo húmedo) encima de uno de los platos. Humedece con agua de la llave (si el agua de la llave es demasiado impura hazlo con agua hervida que has dejado enfriar) sin que la servilleta quede emparamada (demasiado húmeda). Debe ser lo suficiente para que esté toda mojada pero no tanto para que se riegue —un balance —.
Si vas a germinar semillas de cannabis de distintas variedades al mismo tiempo, recuerda poner una etiqueta que te recuerde cuál semilla es cual. Es obvio lo sé, pero me ha pasado :). Lo mejor es ponerlas fuera de la servilleta (porque el agua puede correr la tinta) de una forma que sea fácil de reconocer. Yo lo hago marcándolas en el plato o utensilio que las cubre.
Deja el mayor espacio que puedas entre semillas y ponlas sobre la servilleta previamente mojada. Pon las semillas de la misma variedad cerca para que las puedas reocnocer facilmente. Es clave que en todo el proceso siempre sepas cuál se millas es cuál.
Humedece la segunda servilleta (puede ser un poco menos húmeda que la primera o puedes simplemente doblar la primera) y encierra tu semilla de cannabis. Pon el otro plato encima, cubriendo toda la servilleta y déjala de 3 a 10 días hasta que la semilla germine. Cubrir la semilla con otro plato previene accidentes (que algo le caiga encima) y evita que la semilla reciba luz (emulando las condiciones de una semilla que se planta en la tierra para germinar).
Revisa todas las mañanas cómo va la semilla. Si notas que la servilleta se está secando puede usar un gotero o simplemente dejar gotear la llave para ponerle un poco más de agua (calibra el chorro antes de poner tus semillas bajo este). Con que revises una vez al día está bien. No es necesario que estés revisando cada hora (o cada segundo).
Una vez la semilla de cannabis haya germinado y veas el cuerpo de esta, agárrala por el cuerpo con delicadeza y pásala al sustrato o medio donde la vas a sembrar. Este proceso lo debes hacer con mucho cuidado ya que la plántula está en un momento frágil. Esta debe quedar medio centímetro sumergida y con la raíz apuntando hacia abajo. No te mates la cabeza si esto no sucede, la semilla detecta la gravedad y sabe hacia dónde orientarse.
En este momento mi método favorito es usar el jiffy para germinar mis semillas. Si quieres más consejo en este Link encuentras la Guía completa para germinar tus semillas de marihuana
¡Ya está! ¿Si ves lo fácil que es? Ahora ve a nuestra tienda, escoge tu semilla y empieza a germinar.
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Me encanta viajar. Amo la marihuana, los psicodélicos y la naturaleza en general. En una sociedad confundida, deprimida y ansiosa creo que la naturaleza tiene el poder de sanar, de enseñarnos y de recordarnos que todos somos uno y que la felicidad no está en lo que nos vende la publicidad si no en saborear los momentos que nos ofrece el presente.
Catacoa es mi forma de crear un espacio físico y virtual donde las personas puedan compartir sin tabús y dejando los prejuicios a un lado.
